Mes: junio 2020

DÍA DE SAN JUAN

Hoy, 24 de junio, se celebra el día de San Juan, pero cuál es su origen. No voy a entrar en en un estudio profundo sobre ello ni mucho menos. Parece que tiene que ver con el solsticio de verano, aunque este se haya producido unos días antes, el 21.

¿Es una fiesta de origen pagano o cristiano? Según los indicios es de origen pagano, cristianizada y asociada al nacimiento de San Juan Bautista.

Es la noche de las hogueras que se celebra a lo largo y ancho de la geografía nacional, aunque este año con el COVID 19 no será igual.

Yo creo que también tiene algo que ver con el inicio de las labores de recogida de las cosechas que se realizaban a lo largo del verano y terminaban a mediados de agosto.

En nuestro pueblo, que está dentro del “Campo de Cámara”, la mayor parte del cultivo era de cereales, trigo y cebada, aunque estos hayan decaído hoy, y por estas fechas ya empezaban a granar y estaban preparados para la siega. Antes, cuando aún estas labores se hacían a mano, venían cuadrillas de segadores que iban de haza en haza y de cortijo en cortijo, contratados por sus dueños para realizar estas labores, hasta que llegaron las segadoras mecánicas y , por último, las cosechadoras que hacen todas las labores en una sola función.

El día de San Juan era de holganza para los trabajadores del campo, así como el de Santiago y los de Feria.

Pero volviendo a nuestro pueblo. Este día era en los años 50 y posteriores muy celebrado. Se hacían verbenas y fiestas. Hubo una época en la que los y, sobre todo, las jóvenes del pueblo se encargaban de ello.

Me contaba Maruja “la de Montañez” que ella y sus amigas Loli “la de Peritos”, Antonia “la de Tedoro”, Isabelita «la de Chiriví”, Pepita “la del teléfono”, Anita Mancebo y otras muchas preparaban días antes, en la posada de su tío, unos muñecos con ropa vieja y que los rellenaban con paja de la que tenía para las caballerías. Luego el día de San Juan eran quemados en la calle Real colgados entre los balcones de Montañez y los de los Pepe Lucía. Pero entre tanto los sentaban como dos vecinos más, y allí con el resto de ellos aguardaban charlando, contando historias, escuchando la música de pasodobles y bailando hasta la hora de la quena. Me recordaba también que una de las vecinas, Josefita Leiva, era la que maquillaba a los viejos.

La calle quedaba prácticamente cortada y muy animada a la que a acudía mucha gente a verlos, incluso del campo.

También había carreras de cinta a caballo. Las jóvenes bordaban las cintas y luego se la enlazaban al brazo del jinete que había cogido la cinta con su nombre. Hubo también fiestas organizadas, como la que se detalla en el cartel que inserto, cedido por Lidia Gómez. Parece que el organizador también hizo un concurso de juego de bolas y boliches, pues en el reverso aparece una compra de este material.

Una costumbre que había y que hace mucho tiempo que se perdió era la de “pasar a los niños por la mimbre” . Costumbre de origen pagano y sin base científica, que también compartían algunos pueblos del entorno.

Esto se hacía a las doce de la noche y consistía en coger a un niño pequeño y con una quebracía, con una hernia, para lo que se necesitaban tres Juanes y tres Marías al que se pasaba por una rama abierta de una mimbre, que es un arbusto que se cría en los arroyos. En el pueblo lo he visto hacer en la cañada de las Monjillas. Otro sitio era El Ciprés. También era necesario, digamos, un maestro de ceremonias, que era el que elegía el lugar y la mimbre.

El rito que se seguía era más o menos así:

Tres Marías a un lado y tres Juanes al otro. Comenzaba María.

-Juan por la gracia que tienes y la que Dios te dará,

quebrao te lo entrego y sano me lo devolverás

-Yo lo recibo, y lo volvía a pasar por la mimbre entregándolo a otra María y diciendo:

-María por la gracia que tienes y la que Dios te dará,

quebrao te lo entrego y sano me lo devolverás.

Y así hasta pasar por las tres parejas (seis veces).

Al final unían la rama abierta con barro y la ataban con un trozo de tela o saco y si la rama no se secaba , el niño se curaba.

Me han contado un caso en el que la niña a la que se le aplicó este ritual sanó, que el maestro de ceremonias fue Juanico Aldana y que el hecho tuvo lugar en la cañada de Las Monjillas, frente al pozo

Si mal no recuerdo la última fiesta de San Juan que se hizo fue en el año 1986 y estuvo dedicada al fuego; en ella se quemaron dos muñecos en el mismo lugar de los años indicados, quizá rememorando aquellas fiestas. Al al final cada cual se montó su fiesta como pudo.

Los bolones eran de barro y podrían tener como 1,5 cm de diámetro; los mármol, como nombre indica, eran de este material; las bolas solían ser de cristal y eran algo más pequeñas, hoy son canicas; los niques eran las bolas de los cojinetes, eran de hierro y, por último, los boliches que eran de barro y como de 1 cm o algo menos de diámetro.

Las siguientes fotos son del 1986

Felicidades a todas y todos los que celebran su onomástica.

Andrés Muñoz Cabello, 24 de junio de 2020

BANDO

En el periódico semanal LA UNIÓN PATRIÓTICA de Antequera, el 10 de diciembre de 1928, aparece la siguiente publicación

De Villlanueva de la Concepción

Apostillas a un bando

Días pasados apareció en las esquinas de nuestro amado «pueblecillo» el siguiente bando:

«Miguel Fernández Rodríguez, Alcalde pedáneo de este anejo, hago saber: Que habiendo llegado a esta Alcaldía repetidas quejas por la actitud y proceder de los niños en la calle, tan poco respetuoso y edificante, cogiéndose a la trasera de los coches que por esta pasan, exponiéndose con ello a un accidente de lamentables consecuencias; tirando piedras por las calles, con grave peligro para los transeúntes; chillando en masa por cualquier insignificante cosa que les llama la atención, e incluso faltando al respeto a las personas mayores, síntomas que delatan la deficiente atención que todos ponemos en la educación y perfeccionamiento de los hombres del mañana, con grave riesgo para ellos por cualquier accidente que hoy pudiera sobrevenirles, en tan necias diversiones, y más deplorable todavía por no inculcarles de pequeños buenos hábitos, para que mañana sean ciudadanos modelos.

»Por todo esto, el Alcalde que suscribe, llama la atención y espera de todos los padres y del vecindario que colaboren a esta obra de decoro ciudadano para que no puedan tratarnos de incultos los forasteros que a ésta lleguen (como hoy ocurre) y a tal efecto prohíbo:

»1.º Que los niños se cuelguen a los coches y camionetas que pasan por nuestras calles y carreteras, ni les apedreen ni obstruyan el paso.

»2.º Que tiren piedras por las calles ni las echen en las fuentes públicas.

»3.º Que formen algaradas callejeras, gritando y profiriendo palabras incorrectas.

»4.º Que se mofen y no guarden el respeto debido a las personas mayores que, por el hecho de serlo están autorizadas siempre para corregir y reprender a los niños, y

»5.º Cualquier otro acto o acción que pueda difamar o escarnecer a nuestro pueblo, que todos, con nuestra conducta, debemos dignificar y ennoblecer.

»Las órdenes antedichas serán vigiladas por la policía a mis órdenes y cualquier infracción de las mismas será denunciada a la autoridad competente y castigada con la multa que proceda.

*Villanueva de la Concepción a 25 de noviembre de 1928. — El Alcalde Pedáneo, MIGUEL FERNÁNDEZ .

***

Muy bien, Sr. Fernández: pero qué admirablemente está su bando, ya que prueba su gran preocupación por el mejoramiento y perfección de nuestro pueblo, tan necesitado de una mano generosa, y nada mejor, desde luego, que formar debidamente los hombres del mañana, ya que los hoy militantes creo somos incorregibles, por haber estado viciado el medio de nuestra formación.

El anterior bando nos convida a decir cuatro cosas desde la tribuna de la prensa; ya que ellas viven en la conciencia de estos vecinos. Como al exponerlas las creemos compatibles con los máximos respetos que guardamos al señor Alcalde de la Ciudad D . Carlos Moreno, así lo hacemos constar para evitar torcidas interpretaciones.

Los vecinos de la Cuesta del Palmar pagamos religiosamente, los impuestos que ese dignísimo Ayuntamiento nos impone, como igualmente los de la Hacienda pública.

Sin embargo en las calles del pueblecillo existen trozos desempedrados donde se pueden enterrar cristianos, por ser muy importante el tránsito de vehículos.

La mayor parte de nuestras casas no tienen acceso a las tuberías de desagüe, por existir estas solamente en contadas calles, y por lo tanto no se pueden instalar sumideros para deyecciones y aguas sucias yendo éstas, con gran escarnio de la higiene, a la vía pública.

Nuestras mujeres aunque estamos en el siglo X X lavan la ropa en lebrillos a las puertas de sus casas—aquí deduzca el curioso lector—, por no tener un lavadero, que podía reducirse a un cobertizo con una docena de losas. De la traída de aguas no hacemos mención, a pesar de su urgente necesidad, porque, según las gestiones del Sr. Fernández, será pronto un hecho; si no antes, para el verano de seguro.

Todo esto, Sr. Alcalde , y otras mil deficiencias que por no hacernos pesados callamos, ¿no se ha tenido presente en los Presupuestos que actualmente se confeccionan? Tan poco nos merecemos que haya unas miserables pesetas para esta calle de Antequera?

El más humilde de los vecinos de Villanueva, suplica a usted Sr. Moreno , no nos olviden tanto y tengan presente las apremiantes necesidades de este anejo.

UN VECINO 4 Diciembre 1928.

A esas necesidades que apunta el autor de la carta y a cuantas pone de relieve el actual estado de Villanueva de la Concepción, fruto del abandono de muchos años acudirá el Municipio, como viene acudiendo a resolver otros problemas, sin que para ello necesite de ajenos estímulos.

Desde luego el sistema de alcantarillado no estaba extendido por por todo el pueblo, según las referencias siguientes.

En cuanto al lavadero también hay una referencia.

1935

Varios vecinos de la calle Carretera enviaron una carta, dirigida al Sr. Alcalde, leída en el pleno del 12 de abril, solicitando al Ayuntamiento que facilite los tubos de cemento y que los cuarenta y dos vecinos de la calle aportarán el resto, ya que la calle es un foco de infección al desaguar los caños a la misma por no tener alcantarillado.

La Comisión de la Policía Urbana dictamina negativamente, mediante informe leído el 31 de mayo, sobre la solicitud de D. José Pérez Mérida para aprovechar el derrame de las fuentes de la Plaza y calle del Cuartel de Villanueva de la Concepción.

Se abre una deliberación y varios concejales se manifiestan diciendo que se haga un estudio más profundo del asunto, pero que se puede conceder sin perjuicio para nadie. En sentido contrario se pronuncian los Sres. Velasco Dorado y Viar, manifestando que puede afectar a un lavadero público. Y por unanimidad se acuerda que pase nuevamente a la Comisión de la Policía Urbana.

1936

El 26 de junio fue aprobado un presupuesto de obras para instalar el alcantarillado en la calle Santa María y que supone 1630 ptas. A propuesta del Sr. Villalba se aprueba y que pase a la Comisión de la Décima para su ejecución con cargo a sus fondos.

Andrés Muñoz Cabello, 14 de junio de 2020

HISTORIA DEL TELÉFONO EN VILLANUEVA DE LA CONCEPCIÓN (II)

Una vez inaugurado con toda pompa, la encargada de la gestión de la Central fue durante bastantes años Ángeles Grajales Vargas (“Ángeles la de María Vargas”), que vivía con sus dos hijos Pepita y Sebastián (Nene) en la primera planta de la casa; por cierto muy aficionado y buen futbolista que formó parte del Club Deportivo Torcal. Además ella era peluquera.

En la planta baja estaba la Central con un vestíbulo y una pequeña cabina y a continuación, tras una ventanilla, lo que era la Centralita. Esta era como un centro financiero. Por teléfono se hacían muchas gestiones económicas: compradores y vendedores de granos, ganaderos, comerciantes… También fue un alivio para los que tenían familiares fuera, pues a través de este medio podían comunicarse más rápido que por correo . Incluso se daban avisos particulares como nacimientos, defunciones, o cualquier otra noticia urgente, que la telefonista de turno se encargada de dar el aviso personalmente. En fin fue, digamos, como una pequeña revolución que llegó al pueblo, aunque con bastante retraso. Allí debieron ocurrir muchas anécdotas.

Cuando Ángeles se trasladó a Málaga con sus hijos, fue sustituida por su cuñada Francisca Cobos Ríos “Paca de la Chiriví”, que estuvo hasta el cierre de la misma. Con ella atendieron la Central Antonia Pérez Muñoz, Josefita “Fifita” Mari Julia Anguita, Juanita Marín (11 años) e Inés Marín (4 años).

Me ha contado Antonia que ella entró en la central del pueblo en 1966, aproximadamente en septiembre, con Ángeles; pero que también había una chica llamada Josefita, a la que nombraban por “Fifita”, que era la que tenía que enseñarle el manejo del teléfono a ella; aunque por poco tiempo porque se trasladó a Málaga para trabajar en Intelhorce; luego siguió con Paca “la de Chiriví”, que además de llevar el teléfono atendía con su marido Sebastián la tienda que tenían por debajo del estanco y ella, Antonia, era la que atendía la central. Y así hasta finales de 1968. En febrero de 1969 se trasladó a Málaga con sus padres.

Eran usuarios habituales, según el relato de Antonia: Antonio “el Municipal”, Jose Porras, Antonio Cobos, José Zamorano , Juan Brenes padre y Juan Brenes hijo , siendo un chiquillo venía con la bicicleta a llamar a repuestos Rubio, también Paco el de la Tahona y Ana Mari Rubio, siempre para llamar a la Fabrica Moreno, Pili Cuesta para llamar a la Cooperativa de Farmacia…

Mari Julia fue otra de las telefonistas, que estuvo entre 1968 y 1974/5. Tras dejar el teléfono entró en la Cooperativa Eva. En aquella época, a finales de los años 60 y primeros de los 70, se empezaron a instalar teléfonos particulares a través de operadora.

Juanita Marín y su hermana Inés fueron las últimas telefonistas que atendieron la centralita durante 11 y 4 años en turnos alternos, pues además trabajaban en la cooperativa.

Puede que algunos años se solapen, pero hay que tener en cuenta el tiempo que ha pasado.

Recuerdo que el la casa de mis padres era el nº 98, al que le correspondió el 2753087 cuando se automatizó el servicio. Aún conservo el aparato, que es de ruleta porque ya estaba establecido el servicio automático.

Me he acordado de la siguiente anécdota, siendo el servicio, todavía manual: En una de las facturas mensuales aparecía una llamada a Estados Unidos, sin más especificación, de nada más y nada menos que de 250 Ptas, de aquella época; nadie sabía cómo aparecía aquella llamada. Menos mal que Paca nos tranquilizó, se hizo la reclamación y devolvieron o no cobraron el importe. Me comentó Mari Julia que a fin de mes sacaba Paca el listado de llamadas de cada abonado y que iban a pagarlo a la centralita. Luego iba Mari Julia a la oficina de correos a poner un giro a Telefónica de Málaga.

Algunos teléfonos significativos eran los siguientes: Central, 199; Caja Ahorros Antequera, 23; Caja Ahorros Ronda, 149; Caja Rural, 29; Cooperativa Eva, 108; Colegio Los Naranjos, 44; D. Manuel Correa (Médico), 50; Farmacia, 49; Oficina Municipal, 753176…

En 1973 todas las capitales de provincia disponían de centrales automáticas; pero hasta 1988 no se completó en el territorio nacional. En nuestro pueblo parece que fue en 1984 y en un listado mecanografiado, con número antiguo y nuevo, que me han cedido, contaba con 186 abonados más 60 nuevos.

Tras cerrar la centralita y trasladadas las instalaciones a la Avda. Blas Infante, la casa fue modificada albergando la Tenencia de Alcaldía, Casa Consistorial y en la actualidad es la sede de una asesoría administrativa.

Después de la automatización y el cierre de la centralita fueron instaladas algunas cabinas telefónicas.

A continuación inserto algunas fotos y la publicación que hizo El Sol de Antequera referente a la inauguración .

Desde aquí quiero manifestar mi agradecimiento a cuantas personas me han facilitado testimonios orales y datos para completar la elaboración de esta historia, así como a Loli Conejo por la colección de fotos de la inauguración de la Central del Teléfono.

Andrés Muñoz Cabello, 11 de junio de 2020

HISTORIA DEL TELÉFONO EN VILLANUEVA DE LA CONCEPCIÓN (I)

Hoy, 11 de junio de 2020, se cumplen 65 años de la inauguración de la ya desparecida Central Telefónica de Villanueva de la Concepción.

Voy a contar cómo se llegó a conseguir la instalación del teléfono en el pueblo, que no fue como se suele decir un camino de rosas, sino todo lo contrario.

Según lo que se recoge en las actas del Ayuntamiento de Antequera,todo empezó hace 89 años, cuando D. Sebastián Márquez López era Concejal en el Ayuntamiento de Antequera, tras las elecciones del 12 de abril de 1931, pidió por primera vez, el 6 de mayo, que se solicitara a la Compañía Nacional de Teléfonos la instalación del teléfono, argumentando que la línea pasaba por el pueblo.

Tuvo que pasar casi un año, 17 de febrero de 1932, cuando el Sr. Viar Flores, que también era Concejal por el pueblo, preguntó por la instalación del teléfono, a lo que el Sr. Alcalde Presidente le contesta que ya ha hecho gestiones varias veces, pero que la Compañía exigía demasiado, por lo hubo que desestimarlas.

En agosto de ese mismo año se publicó en BOP una circular, mediante la cual todos los ayuntamientos que tuvieran poblaciones y agregadas y que no tuvieran teléfono público deberían acordar, antes del 31 de diciembre , facilitar casa casa para el servicio y funcionario, transporte del material de línea, facilitar los peones necesarios para la construcción e instalación. También consignar en los presupuestos la cantidad necesaria para gratificar al funcionario.

Del tema del teléfono no se vuelve a hablar hasta el año 1935.

La Compañía Telefónica cada vez pedía más, por eso los concejales del pueblo (Márquez y Viar) y otro de Antequera (Cuadra Blázquez) proponen que en los presupuestos se recojan partidas no inferiores a 2.000 ptas. para compensar a la compañía telefónica por los gastos y abonar esa cantidad durante cuatro trimestres consecutivos. La Compañía, claro está, estuvo de acuerdo con la propuesta del Ayuntamiento.

El teléfono seguía pendiente, y en este caso el Sr. Viar , el 27 de septiembre, pide a la Presidencia que haga las gestiones oportunas ante la Compañía Telefónica para instalar el teléfono, indicando que hay “pueblecitos” más pequeños que ya lo tienen. La Presidencia responde que se han hecho las gestione adecuadas y que se volverá a insistir.

La cuestión del teléfono seguía sin resolverse. El 7 de octubre el Sr. Cuadra manifiesta que la compañía había hecho todo lo que había podido y que desde la Dirección de Sevilla se supeditaba la instalación en Villanueva a otras que estaba llevando a cabo. Entonces propuso recurrir a influencias a ver si podían ayudar al solución. Propuso recurrir a D. Alejandro Lerroux, Jefe del Partido Radical y al antequerano D. José Romero, jefe de la Compañía en Madrid.

Las influencias que ejercieran estos señores no darían buen resultado porque hasta enero de 1944 no se volvió a tratar el asunto en el Ayuntamiento.

En el pleno del 13 de enero de 1944 se dio lectura a una circular del Excmo. Señor Gobernador Civil y Jefe Provincial del Movimiento de Málaga ( D. Emilio Lamo de Espinosa) que estimula el celo de los rectores de la vida local para el afrontamiento de diversos problemas encaminados al fomento de los intereses comunales, acordándose respecto de ello:

…Telecomunicaciones: Diversos acuerdos encaminados a la dotación de teléfono a Villanueva de la Concepción y a los otros anejos, así como al establecimiento del automático en la ciudad …

La Compañía Telefónica le comunica a la Gestora del Ayuntamiento, después de más de un año, (25 de abril de 1945) que es técnicamente imposible establecer ninguna derivación de la línea telefónica para dotar del servicio al anejo de Villanueva de la Concepción.

No estaba mucho por la labor. La cosa iba de mal en peor.

En 1953 un numeroso grupo de vecinos envió un escrito al Ayuntamiento, que fue leído en el pleno del día 15 de mayo, en el que manifiestan su deseo desde hace muchos años de contar con el servicio del teléfono, que hasta ahora no había sido posible por las naturales dificultades de índole económica, por lo que al no existir cantidad asignada para ello en el presupuesto ordinario del año en curso, proponen anticipar ellos la suma de ciento quince mil pesetas, que era lo necesario para que se llevara a cabo la instalación rápidamente, contrayendo este Excmo. Ayuntamiento el compromiso de ir liquidando dicha cantidad anualmente, o sea, en varias anualidades, mediante la suma prudencial que se estime consignar en sus presupuestos, reembolso que se haría cada año a los Sres. que contribuyera a dicho anticipo, bien proporcionalmente o bien mediante sorteo, en la forma que oportunamente y a posterioridad se determine o convenga.

En definitiva el Ayuntamiento acordó, a propuesta de la Comisión Permanente, devolver esa cantidad en siete años a razón de 16,428,50 Ptas cada año.

Cómo estarían los vecinos del pueblo con el tema del teléfono, solicitado por primera vez el 6 de junio de 1931.

Hay que tener en cuenta, además que ya había terminado el racionamiento, que los industriales, comerciantes y vecinos habrían mejorado su situación económica y que, con los tiempos que corrían, necesitaban este medio de comunicación.

Por fin en el año 1955 llegó el deseado teléfono, pero al Compañía Telefónica Nacional de España, como decía al principio, no lo ponía fácil.

El Sr. Alcalde de Antequera informó a los Sres. Concejales, en el pleno del 13 de enero de 1955, de la prolongada gestión ante la C.T.N.E. para la instalación del teléfono y dotación del servicio en Villanueva de la Concepción.

Una comisión de vecinos visitó al Sr. Alcalde, manifestándole que estaban dispuestos a cumplir todas las exigencias que requería la Compañía. El Sr. Alcalde les comunicó que la Compañía únicamente quiere adquirir el compromiso con el Ayuntamiento, por lo que el problema es difícil, ya que a la Corporación Municipal le resultan inaceptables por inmoderadas, las exigencias y condiciones que la Telefónica pretende imponer para establecer el servicio.

Estos no se daban por vencidos y les recordaron el acuerdo del 15 de mayo de 1953.

Las exigencias de la compañía eran las siguientes:

1º.- Acceder a la petición formulada por la C.N.T.E. para que le sea facilitada con carácter gratuito y permanente casa adecuada donde pueda instalarse el Centro Telefónico, con vivienda para la familia que ha de prestar servicio.

2º.- Igualmente fue acordado que los alquileres sean con igual carácter de gratuidad y permanencia a cargo del Ayuntamiento, así como también los gastos de alumbrado, tanto del Centro Telefónico como de la vivienda del encargado.

3º.- También se acordó sean sufragados por el Municipio los gastos que en su día tenga que realizar la C.T.N.E. con motivo de los traslados del Centro a otro domicilio, si rindan impuestos por causas ajenas a la norma y la Compañía los aceptara.

4º.- Previendo la posibilidad de cese de la familia encargada del Centro y en los intervalos hasta el nombramiento de la que deba sustituirla, el Ayuntamiento se compromete a facilitar a la Compañía el personal necesario para la debida prestación de los servicios.

5º.- El Ayuntamiento contribuirá con la aportación de 26.450 pesetas, que satisfará a la Compañía a su requerimiento, para contribuir a los gastos de instalación, y facilitará también los materiales y mano de obra interesados por la Compaña, consistentes en aportar también 960 Kg de hilo de cobre electrolítico de 2xx mm de diámetro.

A pesar de todas las exigencias de la C.T.N.E., el teléfono fue inaugurado el sábado 11 de junio de 1955, 24 años después de la primera petición.

No termina aquí el tema del teléfono, pues en el pleno del 11 de agosto fueron ampliamente tratados los asuntos del teléfono. Resulta que los gastos habían sobrepasado la cantidad presupuestada en 15,635,42 Ptas, según justifica el grupo de vecinos que ha intervenido en ello con el alcalde de barrio, D. Francisco González Pérez, por lo que los vecino reclamaron al ayuntamiento dicha cantidad.

D. Francisco Martín Ranea ofreció una casa valorada en veinte y siete mil pesetas. La casa fue adquirida por el Excmo. Ayuntamiento, pero no por ese precio, sino por la cantidad que excedía lo presupuestado (15,635,42 Ptas). La Corporación autorizó al Sr. Alcalde para formular la compraventa de dicha casa donde se ha instalado el Centro Telefónico del anejo, que carece de título escrito, y es la marcada con el número uno de la calle General Mola, y lindera por la derecha, entrando, con otra de Diego Cisneros Vergara; por la izquierda con la carretera de Málaga y por la espalda con solar cubierto, propiedad de Manuel Silva Luque.

La Corporación felicitó al Sr. Alcalde, D. Luís Moreno Pareja Obregón, por las gestiones realizadas para llevar el servicio telefónico a Villanueva de la Concepción.

Andrés Muñoz Cabello, 11 de junio de 2020